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PROYECTO DE LEY DE REFORMA DEL ABORTO

Es necesaria la movilización

Carme Álvarez, 13 de enero de 2014




Sin duda ha sido un fuerte golpe para todas las feministas la aprobación, el día 20 de diciembre, por el consejo de ministros de la reforma de la ley del aborto propuesta por el ministro Gallardón. La «Campaña por el derecho al aborto libre y gratuito», de la que formamos parte y a la que apoya nuestra organización, venia preparándose para lo que se avecinaba desde que se supo lo del proyecto. Las alertas eran constantes, pero ¿quizás pensábamos que no se atreverían, que no podíamos volver a las catacumbas? Pero la realidad para las mujeres trabajadoras que necesitemos abortar será la incertidumbre, los miedos, la clandestinidad…. si el proyecto no se paraliza,... pero lo cierto es que no se ha aprobado todavía, un tiempo muy preciado para salir a la calle, movilizarnos, encararnos. ¡No puede ser que nos menosprecien de esta manera! ¡No tiraremos la toalla! ¡No nos declararemos insumisas a la ley antes de que se apruebe! ¡No aceptamos esta ley regresiva contra las mujeres haciendo simplemente declaraciones! ¡Saldremos a la calle, cada día, cada noche, es necesario! Acamparemos en las plazas (ahora que aún no tenemos también la otra ley de la seguridad privada, de este gobierno del PP y sus cómplices, entre ellos CIU que votan en Madrid a favor y aquí amagan las intenciones). Podría ser que este Proyecto le vaya de perlas al PSOE porque tendrá una cosa más para echarle en cara al Gobierno del PP, pero no hará nada, no movilizará; de momento no se le ve la intención.

La verdad es que toda esta trama contra las mujeres trabajadoras parece que no es casual, que/ si ya nos han desprovisto de suficientes derechos laborales, sociales, sindicales y al PP no se le pasa factura y ¿por qué no, dar una vuelta más? España es uno de los países con menor tasa de fecundidad, el 141 en el mundo, y de natalidad, el 136 del mundo. Y eso no es bueno para el capitalismo global que una vez conseguida la miseria globalizada ya no le interesan las migraciones y por tanto las mujeres han de ser fecundas para dar fuerza de trabajo en sus respectivos países y que la tasa de reemplazo sea la adecuada (en España es de 1,32 por mujer cuando es necesario el 2,1). Las estadísticas de abortos en España datan de 1985 cuando se hizo la primera ley de supuestos y desde entonces los datos que vemos en la gráfica han ido aumentando paulatinamente a medida que se generalizó y formalizó la seguridad de los abortos en los hospitales públicos y privados sin miedo a las represalias. A pesar de todo ha habido episodios de denuncias por parte de los ultra católicos a médicos y clínicas privadas, y se manifiesta contra el aborto una fervorosa clientela auspiciada por padres de la iglesia católica que ven cómo se les acaban las y los feligreses y con ellos el momio del que viven, ya que necesitan su dependencia y caridad para sobrevivir.

Las religiones a nivel mundial juegan un papel importante en la ofensiva contra las mujeres tanto en lo relativo a la moral como a intereses muy ligados a los beneficios de la opresión y la explotación de la clase trabajadora. Por un lado, tenemos el control de las mujeres, de sus cuerpos y de sus vidas, y por el otro, la necesidad del capitalismo global de seguir utilizándola para sus fines de (re)producción de la fuerza de trabajo.

Es necesaria la movilización continuada contra el proyecto de ley «Gallardón» que infantiliza y victimiza a las mujeres que queremos abortar y le decimos: ¡¡somos mujeres maduras y formadas para decidir sobre nuestro cuerpo y nuestras vidas y nos organizamos para salir a la calle y defender nuestros derechos que son inalienables!! En toda Europa, y en el mundo, las mujeres se niegan a aceptar este retroceso en el camino hacia el total derecho a decidir sobre el propio cuerpo; grupos feministas franceses ya se han movilizado en Niza, Tolouse, Montpelier, Lyon; las inglesas en Edimburgo; las italianas de Usciano dal Silenzio también han manifestado su apoyo. En todo el Estado comienza la preparación de la respuesta masiva; las asturianas con el Tren de la Libertad, las madrileñas convocando manifestación para el 8 de febrero y en Catalunya a la espera de las movilizaciones que salgan de la reunión de la Campaña con la que se quiere provocar que el Parlamento catalán legisle una ley propia. Todo es poco para obligar al gobierno del PP y los que le ayudan a retirar el proyecto y avanzar hacia la despenalización real y total del aborto.

Para tener el derecho a un proyecto de vida propio, las mujeres queremos puestos de trabajo estables para poder gozar del derecho a la maternidad. Ningún despido por embarazo. Con la igualdad salarial -salario mínimo de 1.200 euros- entre mujeres y hombres por trabajos equivalentes y el reparto de éste, tanto el reproductivo como el productivo, se eliminará el paro. Y para garantizar que podremos reproducirnos con garantías sociales, incluyendo a todas las personas inmigradas y emigrantes, queremos viviendas sociales, guarderías, residencias para gente mayor y dependientes, sanidad y educación públicos y gratuitos de gestión directa.

Por un aborto libre y gratuito en la sanidad pública que no permita la objeción de conciencia a los profesionales que ejerzan en los hospitales de la red pública. La garantía de una educación afectivo- sexual en libertad no discriminatoria por razón de género.

Y el derecho, el acceso y la difusión de la información de todos los métodos anticonceptivos (entre los que se encuentra la píldora postcoital) cuyo suministro debe ser gratuito.

Porque es inalienable el derecho de las mujeres a decidir sobre su embarazo/cuerpo sin límites, ni supuestos. Las mujeres parimos, las mujeres criamos, las mujeres decidimos.

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