El jueves 4 de septiembre se presentó «Capgirem Girona» -Cambiemos Girona- la propuesta abierta que hace la CUP de Girona a col•lectivos, organizaciones, movimientos….

Consistió en una asamblea abierta que participaron un centenar de personas en representación de varias organizaciones independentistas, anticapitalistas, plataformas y personas a título individual para empezar a definir como tiene que ser este espacio, cuáles tienen que ser los ejes prioritarios del nuevo modelo de ciudad que necesita Girona, como nos tenemos que organizar para avanzar hacia él… Si recordamos en la Asamblea Nacional de la CUP en Olot hace dos años, se planteó la disyuntiva: la CUP era ya la Unidad Popular y sólo habría que abrir sus estructuras para más gente, o había también organizaciones y otras realidades políticas dentro de un concepto amplio de unidad popular, y había que desplegar el espacio AE, un espacio no independentista en que hay organizaciones, políticas y municipales, de la izquierda alternativa o revolucionarias. La opción que salió de Olot fue la primera, LI estábamos por la segunda. La realidad actual confirma que nos encontramos con un guirigay de alternativas (Procés Constituent, Compromís Girona, Podem, en Barcelona Guanyem Barcelona...) y todo el mundo llamando a la unidad en torno a él/ella (sea personaje u organización), considerando que su proyecto es el unitario. A nuestro entender, también lo ha venido haciendo la CUP este año con las Asambleas Abiertas y las TUP. En Girona hay un nuevo hecho que valoramos positivamente, la ruptura de la CUP con Reagrupament, una de las trabas para hacer un trabajo conjunto.

Lucha Internacionalista participó en la asamblea abierta de Capgirem Girona y presentó un escrito de reflexiones sobre la situación y propuesta a trabajar por una alternativa de izquierdas. Haciendo un resumen del escrito presentado a la asamblea resaltamos: a) Proceso de unidad sí, pero no todo vale. Queremos participar del proceso de Capgirem Girona defendiendo un programa, unos ejes de trabajo... de compromisos claros y concretos de ruptura, así como nuevas formas de organización. En este sentido avanzamos algunas propuestas: el compromiso con las principales necesidades de los y las trabajadoras, medidas de clara ruptura con las raíces de este modelo de ciudad impulsadas desde abajo y plantear una auténtica democracia rescatándola de los poderes que la mantienen secuestrada. No basta con la limitación de cargos, sueldos y mandatos, ni mencionar mecanismos de control futuros, por eso proponemos la rotación en los cargos y la revocación.

b) Otra reflexión hecha fue explicitar que todo el mundo, como garantía de democracia, habla del horizontalismo, de los grupos de trabajo... pero, quien hace la convocatoria controla el aparato, más grande o más pequeño, para acabar concluyendo aquello que él/ella ya pensaba antes y los grupos le rellenan el programa. Esta dinámica se tiene que romper. Los debates tienen que ser claros sobre propuestas concretas que delimiten la reforma de la ruptura, y una vez consensuados, se tienen que desarrollar en los grupos. Lo contrario es demagogia: todos los grupos hablan de un tema, el que sale es el que encaja con la idea previa, el que se contradice, no se recoge, pero tampoco nada se vota... y al final, se acaba cayendo en un pensamiento único «políticamente correcto » que va desde ICV a todo el resto. Pedimos acuerdos alrededor de pocos puntos (3, 5, unos mínimos) que delimiten la ruptura, y entonces sí trabaja todo el mundo por grupos. Pero además, es contradictorio tanto hablar de no-personalismo, de horizontalidad,... y después no se concreta la medida más elemental para combatirlo, que es la rotación en los cargos electos, no sólo con limitación de mandatos.

El resumen de la asamblea enviado por la CUP nos dice «Pensamos que es momento de aglutinar al máximo de sensibilidades y esfuerzos para construir, entre todas y todos, un modelo de ciudad realmente democrática y al servicio de la mayoría de gerundenses; y creemos que Capgirem Girona puede ser una propuesta alentadora que nos permita avanzar a paso firme hacia este objetivo.». Pues adelante y con toda claridad para encontrar un encaje para construir una alternativa supeditada a las luchas y con organismos unitarios. Evidentemente ICV no tiene cabida.