Hace un mes, el 16 de marzo, el PP se quedaba solo sin conseguir hacer aprobar el decreto sobre la estiba. Las movilizaciones de los estibadores en los días anteriores, presionando sobre los distintos partidos dieron sus frutos. El decreto no pasó, y puso sobre la mesa la profunda debilidad del gobierno del PP. Ese triunfo parcial de la lucha, sigue esperando su definitiva resolución puesto que la directriz europea en principio no está cuestionada y por tanto debería haber otro decreto que la desarrolle... o una lucha mayor, a nivel internacional, que derogue la raíz de la directiva. Pero sobretodo marca un antes y un después de cara a las luchas pues no sólo hace retroceder a un gobierno que hasta ahora ha venido imponiendo atroces recortes y medidas antiobreras, sino también frente las mayores patronales internacionales del sector (como Noatum que depende de JP Morgan con beneficios netos de 24.733M de dólares en 2016, o Dubai DP World con 781M de euros en 2015): unos y otros al amparo de la resolución de la UE. Alrededor del conflicto se ha tejido una incipiente coordinación de luchas obreras en la que participamos como Lucha Internacionalista. Entrevistamos a Sebastián Huguet, delegado de la Organización de Estibadores Portuarios de Barcelona.


Lucha Internacionalista.- Después de la derrota del decreto del gobierno de Rajoy sobre la estiba, ¿en qué punto están las negociaciones con la patronal y la administración? ¿Cuáles son vuestras líneas rojas?
Sebas Huguet.- Las negociaciones actualmente están prácticamente cerradas con la patronal. El mediador, ya dio su veredicto al ministerio de Fomento (quedando así finalizada su función) y es este el que tiene que tomar una decisión. El Acuerdo pactado con la Patronal y Sindicatos es el único texto que debería defender en Europa así que esperemos que sea responsable y trabaje en esa línea. En cuanto a las líneas rojas, tenemos muy pocas, pero es fácil deducir que unas mínimas garantías que aseguren nuestros derechos. Es vital incluir en rango de ley: la subrogación de los trabajadores, un marco que contemple los acuerdos colectivos, un registro de Estibadores como en cualquier profesión... en fin, todo aquello que cumpla con la Reglamentación Europea en materia de puertos, la Organización Internacional del Trabajo o la misma Constitución Española. Es decir, que se ciñan a cumplir las leyes.

LI.- ¿Piensas que el gobierno español simplemente sobrepasó la ley europea sobre la estiba, o la ley misma es un ataque a los derechos y conquistas históricas de los estibadores en toda Europa?
SH.- No solo fueron más allá. Sabemos que detrás de la desregularización del sector, en el mejor de los casos, nos encontraríamos con un modelo idéntico al del Puerto del Pireo y en el peor de los casos, el esclavismo enmascarado de la marinería de los buques que después de hacer sus labores en alta mar, al llegar a puerto, en sus horas de descanso, tendrían que hacer las labores de tierra. Ya no solo sería un atentado directo a los Derechos Humanos de los marineros que ya trabajan en circunstancias deplorables, sino que todo ese trabajo no repercutiría en la hacienda pública como ahora dado que la marinería tributa en sus países de origen en el mejor de los casos también...Un desastre sin duda para el sector y para la economía española con la consecuente repercusión en la ciudadanía. al como está la situación

LI.- Tal y el punto de las negociaciones ¿Prevéis nuevas huelgas de los estibadores de España y/o Europa? ¿En qué consistiría un acuerdo satisfactorio para vosotros?
SH.- Somos gente muy optimista, es nuestro ADN. No deseamos ni oír hablar de la palabra «Huelga» por varios motivos. El primero es por solidaridad con el resto de colectivos que dependen de nuestra actividad. Somos conscientes de que un autónomo que no pueda trabajar un solo día, puede provocarle graves complicaciones a final de mes y eso no lo queremos para nadie. El segundo, sería una especie de derrota: si fuéramos a la huelga sería como que hemos sido incapaces de negociar y de llegar a un acuerdo. Ahora bien, también hay que entender bien el tablero en el que se juega y el ministerio, a día de hoy, no ha facilitado el diálogo en ningún momento. El ministerio quería que fuéramos a la huelga. Creemos que ese era su plan.

LI.- Con la iniciativa de los estibadores de Barcelona se ha formado una plataforma de lucha obrera, el CICLO. ¿Nos podrías explicar por qué y que esperáis del CICLO? SH.- CICLO nace de la necesidad. Los Estibadores hemos visto en este conflicto donde están los verdaderos peligros y la voracidad de los lobbys financieros y sus políticas de economía especulativa. Desde CICLO hemos querido exportar nuestra experiencia en la lucha y estamos muy sorprendidos con el resultado que está teniendo. Yo estoy muy orgulloso de los socios que tenemos. Elite Taxi, Lote22, Ferroviarios o los Estudiantes están haciendo un trabajo magnífico y el resto de socios están haciendo una labor constructiva espectacular. El Jueves 6 de abril hicimos la presentación oficial a las 11h de la mañana delante del Parlament de Catalunya con los medios de comunicación. Volviendo a la problemática que dio nacimiento a CICLO: la ciudadanía y los Gobiernos son muy débiles en el Sur de Europa y su legitimidad a la hora de tomar decisiones está prácticamente sujeta al valor de la deuda que tenga. Es una realidad: se acercan el TTIP, el CETA, el TISA o ves a saber que se inventarán en un futuro próximo y el caso es que para cuando llegue todo eso, no podemos vacilar. La clase obrera debemos estar organizados o desapareceremos junto con el sistema judicial tal y como lo conocemos. Creemos que tenemos que retomar la relación con otros colectivos y buscar el nexo común para actuar conjuntamente y en bloque porque no hay otra alternativa. Va a costar que los colectivos que llevan toda la vida en lucha entiendan el concepto de CICLO pero hemos de conseguir que se unan a nosotros. De puertas para adentro somos trabajadores, ni siglas, ni banderas, ni colores, ni marcas. Tampoco vamos a caer en la trampa de cuotas de ningún tipo. CICLO es la máxima expresión de la solidaridad y tendremos nuestra mano tendida a todo aquel que quiera unirse. ¿Me preguntas por el objetivo de CICLO? CICLO nació para hacer estallar una de las últimas burbujas de esta crisis: La Burbuja Obrera