Activistas de la Crida LGBTI y Sororitrans boicoteamos la presentación de un libro transfóbico en la Casa del Libro el pasado 16 de mayo en Barcelona. Los Mossos blindan la librería a porrazos protegiendo el encuentro que acogió a dirigentes de Vox y personalidades conocidas del feminismo transexcluyente.

Un centenar de personas intentamos impedir en Barcelona la presentación de un libro transfóbico en la Casa del Libro de la Rambla de Catalunya. Coincidiendo con la víspera del Día Internacional contra la LGBTI-fobia, las organizaciones Crida LGBTI y Sororitrans convocaron el pasado 16 de mayo una manifestación que pretendía irrumpir en la librería para hacer frente a los discursos discriminatorios contra el colectivo trans. Varias unidades de antidisturbios de los Mossos d’Esquadra nos impidieron la entrada, desplegando un cordón de seguridad ante el establecimiento y escoltando a los asistentes al acto por medio de duras cargas desproporcionadas, provocando al menos 4 personas heridas y media docena de identificadas.

Durante las dos horas de protesta, las activistas desmontamos los argumentos del libro y algunos clientes y vecinos se acercaron para mostrar su solidaridad con los manifestantes, a los que entregamos hojas de reclamaciones al establecimiento. Una vez finalizada la presentación, la policía hizo un cordón para proteger a los asistentes, entre las que se encontraban varias caras conocidas del fascismo, la extrema derecha y el movimiento TERF (feminismo radical transexclusivo), como el diputado de VOX en el Parlament y exmiembro de Plataforma X Cataluña Joan Garriga, la directora del Observatorio para la Igualdad de la UAB Juana Gallego, líder académica de esta corriente tránsfoba, o la profesora y antropóloga Sílvia Carrasco.

"Un fantasma recorre los países más desarrollados: el generismo queer". Así comienza el libro “Nadie nace en un cuerpo equivocado” que los psicólogos José Errasti y Marino Pérez Álvaro presentaron bajo el escarnio de los manifestantes. Desde el colectivo LGBTI denunciamos que el autodenominado feminismo radical está tomando cada vez más relevancia en las calles y en las redes sociales, basando su tesis en falsos dogmas disfrazados de ciencia. El creciente relato TERF niega la existencia de las personas trans y atenta contra su integridad, justificando la violencia sistémica patriarcal que sufren en su día a día.

Bernat Aragó, activista LGBT