La manifestación del 15-O en Madrid, un éxito de la movilización conjunta del movimiento pensionista y de los sindicatos combativos, movimientos sociales y organizaciones.

Concentró a un gran número de pensionistas y de trabajadores y trabajadoras que se mostraron contrarios a las políticas que está aplicando el Gobierno de Coalición del PSOE-UP, contra el conjunto de la clase trabajadora, con la reforma laboral y la de pensiones. Reforma que está en la 2ª fase con más recortes en negociación con CCOO-UGT y la Patronal, un nuevo Pacto de Toledo, y sobre la mesa el intento de llevar adelante un Plan de Rentas que mantenga los salarios por debajo del IPC Real.

Ni siquiera el intento del Gobierno, de frenar la movilización con el anuncio, días antes, de que aplicaría un 8,5 % de aumento de las pensiones para el 2023 con base a las previsiones del IPC Medio, frenó la movilización, sino que hasta la hizo crecer. Los pensionistas estamos hartos de promesas incumplidas, y sabemos que el gobierno no duda en seguir las directrices de Bruselas, y que llevamos un 7,5% de pérdida de poder adquisitivo de las pensiones entre el 2021 y el 2022, que según la reforma del 2021 no recuperaremos al derogar el gobierno el IPC Real y la ‘paguilla’ de salvaguardia del IPC al final de año que habíamos arrancado al PP en el 2018 y que exigimos su recuperación.

En cabecera de la manifestación, la necesidad de volver con el IPC Real para pensiones y Salarios y acabar con la Brecha de género en la Mujer y como medida inmediata la subida de la Pensión Mínima según la Carta Social Europea. Y contra los planes de Pensiones de Empresa, contra las penalizaciones en la jubilación, contra la prolongación de la edad de jubilación y por la defensa de los puestos de trabajo y el pleno empleo.

La participación de sindicatos alternativos y movimientos sociales fue significativa en la defensa de los servicios públicos y contra su deterioro por las privatizaciones, por una vivienda digna y el control de los alquileres, residencias públicas, ley de dependencia….

A pesar de los engaños del gobierno PSOE-UP y de los intentos de separar la política de Calviño y Escrivá del resto del Ejecutivo, en particular de Unidas/Podemos, los pensionistas representan el único movimiento de oposición real que tiene el gobierno. El movimiento pensionista lleva muchos años movilizándose en la calle defendiendo un programa, en especial la COESPE, que no solo defiende los derechos de los y las pensionistas, en particular los de las mujeres, sino que los liga a los de la clase obrera y a los de la juventud.

Que se trabaje por la Huelga General, con el apoyo de los pensionistas

Precisamente por estas políticas contra la clase trabajadora, es necesario que los sindicatos alternativos empiecen a trabajar en la convocatoria de una huelga general por los salarios y pensiones y que el movimiento pensionista la apoye. Porque sin un salario digno no hay una pensión digna.

Por un plan obrero de medidas que son urgentes, es necesario un acuerdo entre organizaciones de pensionistas, sindicatos combativos, movimientos sociales y haciendo un llamamiento a las bases de los sindicatos CCOO y UGT para construir y secundar la huelga general. Motivos tenemos. Que se discuta en los centros de trabajo, en la universidad, que todos y todas, trabajadores, pensionistas y estudiantes la apoyemos.
Por eso hay que seguir con las movilizaciones previstas, hacia el 19 de noviembre en todo el estado.

GOBIERNE QUIEN GOBIERNE, LOS DERECHOS Y LAS PENSIONES SE DEFIENDEN.

Pensionistas de LI