Recuperamos las calles! que la crisis la paguen los capitalistas!

El 1 de mayo llega con millones de personas contagiadas y decenas de miles de muertes por la COVID-19. Los sistemas sanitarios públicos, que durante años han sido desmantelados, se encuentran colapsados por la pandemia. Un virus que no conoce de fronteras pero sí de clases sociales: se ensaña con los barrios obreros y populares, donde el impacto social y económico también es devastador para la mayoría trabajadora. Bajo el estado de alarma, los gobiernos de todo el mundo están fortaleciendo el arsenal represivo de los Estados para avanzar en el control social y evitar una respuesta a sus políticas que nos han llevado a la catástrofe. Por eso en el Estado español se está utilizando la recentralización para prohibir en Cataluña, Madrid, Galicia, el País Vasco y Andalucía, toda forma de protesta en la calle, aunque se respeten las medidas de distanciación.

El Gobierno PSOE-Unidas Podemos ha mostrado su verdadero carácter cargando la crisis sobre los y las trabajadoras con toda una serie de medidas a favor de la patronal y con más de 200.000 ERTOs iniciados con la complicidad de las direcciones de CCOO y UGT, que también han permitido el retorno al trabajo sin garantías. El Gobierno de Cataluña (JxCat-ERC) se excusa en la falta de competencias para esconder sus políticas de recortes y privatización. Sin ir más lejos, acaban de aprobar -con el apoyo de En común-Podemos- unos presupuestos para la Generalitat que ni siquiera revierten los recortes a la sanidad.

“ Estamos impulsando una convocatoria unitaria por este 1 de mayo en la Plaza Sant Jaume. Emplazamos a unirse a todas las organizaciones políticas, sociales y sindicales”

La crisis económica amenaza con ser mucho peor que las anteriores. La burguesía y sus partidos intentan encontrar una salida pactada por arriba que rescate este régimen tocado de muerte. Se habla de unos nuevos “Pactos de la Moncloa” o “por la reconstrucción” para imponer la paz social, hacer pagar la crisis a la clase trabajadora y rescatar a la monarquía, como se hizo en la Transición. Necesitan tener -como entonces- en la clase obrera controlada y, las direcciones de CCOO Y UGT se prestan a ser el apagafuegos de un ascenso obrero con Unidas Podamos como pata izquierda del régimen. Pero ahora la crisis económica es mucho más profunda y los aparatos políticos más débiles. El resultado dependerá de si somos capaces de elaborar un plan de emergencia unitario, de organizar una respuesta a la altura de las circunstancias y de si construimos durante esta lucha una alternativa sindical y política.

Y este plan no se puede limitar a las redes sociales ni a nuestros balcones. Tenemos que recuperar urgentemente las calles, ejerciendo nuestro derecho fundamental a reunión y manifestación. Por eso, y en continuidad con el intento de convocatoria que hicimos para el pasado 24 de abril, estamos impulsando una convocatoria unitaria por este 1 de mayo en la Plaza Sant Jaume, siempre cumpliendo con las medidas sanitarias. Emplazamos a unirse a todas las organizaciones políticas, sociales y sindicales que defienden la clase trabajadora y los servicios públicos.

El capitalismo arrastra años de crisis económica sin solución. Hacia qué mundo iremos después de la COVID-19 es una incógnita. Pero la realidad es que hace tiempo que no hay espacio para medias tintas, migajas, ni reformismos. Hay que construir una alternativa de clase e internacionalista, que sea clara y contundente en denunciar este sistema capitalista imperialista, de hambre y de miseria, de explotación y de opresión. Que diga bien claro que la Unión Europea no es más que un club de estados al servicio de las burguesías nacionales y de las grandes multinacionales. Que reivindique el espíritu de los y de las que hace 130 años impulsaron el 1 de mayo como Día Internacional de los y las Trabajadoras, en homenaje a los mártires de Chicago. Desde nuestra organización internacional, la Unidad Internacional de los y las Trabajadoras Cuarta Internacional (UIT-CI) hacemos un llamamiento a los y a las luchadoras del mundo. Ahora más que nunca hay que construir una alternativa internacional de ruptura con el capitalismo. Ahora más que nunca la disyuntiva es “socialismo o barbarie”.

Por un plan de emergencia de los y de las trabajadoras:

 Sanidad y servicios 100% públicos y universales.
 Nacionalización de la sanidad privada, la investigación, las residencias, la banca y sectores estratégicos como el agua y la electricidad.
 Prohibición de despidos. Reparto de las horas de trabajo sin rebaja salarial. Derogación de las Reformas Laborales.
 Renta universal de confinamiento. Prohibición de desahucios. Defensa de las pensiones públicas, no al Pacto de Toledo.
 Impuestos a la gran empresa. No al pago de la deuda.
 Derogación de la Ley de Extranjería. Regularización extraordinaria y definitiva de todas las personas migradas.
 Derogación de la Ley Mordaza. Anulación de todas las multas bajo el estado de alarma.

QUE LA CRISIS LA PAGUEN LOS CAPITALISTAS!

29 de abril de 2020

Lucha Internacionalista

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